"No estoy de acuerdo con lo que dices, pero defenderé con mi vida tu derecho a expresarlo." Voltaire
¿POR QUÉ ES IMPORTANTE?
El ser humano es un ser social por naturaleza. Nuestra vida discurre entre la vida de muchas otras personas. Y de nuestras habilidades interpersonales dependerá buena parte de nuestra salud mental y nuestro éxito, tanto personal como profesional. Todos tenemos ya estas habilidades, más o menos desarrolladas, pero habitualmente están tan interiorizadas que no nos damos cuenta de cómo interactuamos con los demás.
Los
niños desarrollan en la familia, el colegio y otras situaciones sociales estas
series de habilidades que se convertirán en los cimientos de su personalidad. A
menudo necesitan ayuda para interactuar con otras personas adecuadamente,
comunicarse de forma efectiva, comprender sus emociones y sentimientos o,
simplemente, para superar conflictos.
Gran
parte de lo que conseguimos en la vida depende en gran medida de la gestión
interpersonal, de cómo tratamos y nos relacionamos con los demás. La conciencia
de nuestras propias habilidades interpersonales y de las ajenas nos puede
ayudar enormemente en todas las circunstancias de la vida.
BENEFICIOS
Aprender habilidades interpersonales saludables reduce el estrés, resuelve conflictos, mejora la comunicación, aumenta la comprensión y promueven la salud y la alegría.
CONSEJOS
· Sonríe.
Lo primero que vemos de una persona es su cara.
· Demuestra
que te preocupas por los demás. Cuando algún amigo o compañero hagan algo bien,
apláudele, alaba sus éxitos.
· Escucha.
La escucha activa es un arte perdido. Aprende a escuchar a los que te rodean,
aprenderás mucho y ellos se sentirán más conectados contigo.
· Resuelve
problemas. Sé la persona que acude cuando surgen disputas. Se imparcial y trata
de ayudarles a resolver el conflicto. No sólo harás el grupo más unido sino que
te empezaran a ver como un líder.
· Se un
gran comunicador. Además de ser un buen oyente, es bueno convertirse en un gran
comunicador. Cuando estés con otras personas no digas lo primero que se te
venga a la cabeza. Piensa cuidadosamente tus palabras. y así evitarás
malentendidos.
· Haz
reír. La gente divertida es popular. El humor rompe barreras con compañeros más
tímidos o malhumorados.
· Ponte
en sus zapatos. Desarrolla la empatía para entender cómo se sienten las otras
personas. Ten en cuenta las circunstancias personales de los demás antes de
juzgar. Mirar desde otros puntos de vista te ayudará a comprender el
comportamiento de los que te rodean.
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