"Existe al menos un rincón en el universo que con toda seguridad
puedes mejorar y eres tú mismo"
Mi finalidad última como educadora es la de conseguir el desarrollo integral de la persona, es decir, su desarrollo pleno a lo largo de su vida. ¿Pero es tan fácil como parece?
Para que se den las condiciones adecuadas en las que fomentar este proceso, es necesario tener en cuenta antes unos factores. En primer lugar, hemos de ser conscientes de que “no hay desarrollo integral si no hay educación integral; la educación o es integral o no es verdadera educación”, por lo tanto, debe comprender todo el ser, quehacer, conocer y convivir del alumno ya que de otra manera estaremos simplemente instruyendo.
Para ser capaces de llegar a este objetivo, antes es esencial que los educadores trabajemos unas habilidades y competencias ya que para llegar a nuestros alumnos es importante que vean un ejemplo y coherencia en nuestra figura. En este blog me voy a centrar en la importancia de trabajar algunas de las habilidades más importantes que debe adquirir un educador para ser capaz de lograr y favorecer la formación de todos y cada uno de sus alumnos.